de Zarephath Christian Church-Ministerio Hispano
Pastor Abel Espada
Desde tiempos antiguos, el Espíritu Santo ha comenzado su obra de restasuración y no parará hasta que se haya completado su trabajo en la restauración final. La restauración final es el regreso de la Iglesia “La novia de Jesucristo” a la gloria preparada para ella. Es necesario que haya una fluidez de Dios en su pueblo y que esta restauración por su Santo Espíritu toque a cada criatura que necesite y quiera ser renovado en estos últimos días cuando las profecias se están cumpliendo y vemos y sentimos ese aviso de que una renovación debe ser presente en nuestras vidas si queremos que nuestras vestiduras sean blanqueadas por ese poder renovador y estar listos para irnos a morar con nuestro Redentor y Salvador. Podemos leer en las Escrituras tantos ejemplos de renovación que nos deben motivar a buscar esa renovación para nuestras vidas. Pedro, hace un llamado urgente a retornar a Dios y ser limpios y recibir perdón de pecados mediante la conversión, la obra del Espiritu Santo y la vida que que de Él brota. Hechos 3:19 al 21.
Restaurar significa restablecer la condición original de algo. Cuando Dios restauró a Job, debido a las grandes pruebas que fué sometido, Job recibió el doble de lo que habia perdido; experimentó una abundancia que era mayor a lo que él tuvo al principio de su vida. Seguir a Jesús vale la pena, porque Él multiplica y te devuelve el doble de lo que perdiste. Si es que en esa búsqueda de Jesús perdiste algo de tus pocesiones, ten la seguridad que ganarás más, porque las Santas Escrituras no mienten al respecto. Lee Marcos 10: 29, 30. Otro ejemplo de restauración se puede ver cuando Dios creó al hombre allá en el huerto del Edén. Hombre y mujer decidieron tomar sus propias decisiones en sus manos y desobedecieron a su Creador. El Creador le dijo que de todo arbol del huerto podían comer, mas del arbol de la ciencia del bien y del mal no comieran porque iban a morir. Desobedecieron como quiera, no se respetó la advertencia de Dios. Luego vinieron las concecuencias de la desobedeciencia, la Palabra de Dios debemos respetarla, no importa las circunstancias. Si no obedecemos a Dios y su Palabra nos vamos a acarrear problemas para nuestras vidas. Adán y Eva se vieron desnudos, corrieron a buscar hojas para cubrirse, pero Dios estaba mirándolos desde lo alto, vió sus esfuerzos por reparar el daño ellos mismos. Ni la autosuficiencia de ellos sirvió ahí en su intento de cubrirse ellos mismos. Dios le proveyó una mejor covertura a ambos. Dios le dió túnicas de pieles, sacrificando animals. Ese sacrificio deja ver una luz bien clara que apuntó al sacrificio de Jesús el Cordero de Dios cientos de años mas tarde. Es ahí que el tema de restauración toma cartas en el asunto en el principio de todas las cosas . Génesis capitulo 1 y 3.
Otro ejemplo de restauración fué el de José. Génesis 37-46. En la vida de José se puede ver claramente la obra restauradora de Dios. Faraón puso a José al frente de toda la riqueza de Egipto después de verse abandonado, falsamente acusado y olvidado por el copero que se olvido de interceder a Faraón por José luego de haber sido liberado de la prisión tras haber interpretado los sueños del copero y el panadero ante Faraón. José no solo fué restaurado por medio de la acción de Faraón, sinó que tambíen salvó a su pueblo, de la sequía que llegó mas tarde. Dios siempre ha querido restaurar a su pueblo, constantemente está llamando al arrepentimiento. La humanidad ha rechazado ese llamado que a través de los años Dios ha estado haciendo. Vemos que Dios le ofrece maravillosas promesas de restauración al pueblo tras juzgarlos y disciplinarlos energéticamente. Véase Isaías 58. Los llama al arrepentimiento. Ese llamado siempre ha sido el simplemente volverse a Dios, permitirle limpiar y restaurar al pecador.
Dios obra en nuestras vidas, los que hemos creido en Jesús y hemos nacido de lo alto (Juan 3:3 por medio de la obra de restauración del Espíritu Santo. Cuando aceptamos a Jesús como único y esclusivo Salvador de nuestras almas, vemos esa renovación en nuestras vidas. El Espíritu Santo nos redarguye de pecado cuando hacemos algo que a Dios no le agrada. Nos sentimos incómodos, a veces nos sentimos tristes y que hermoso es cuando comprendemos que es el Espíritu Santo hablándonos. Nos vamos de rodillas a hablar con nuestro Señor y nos llega esa paz cuando reconocemos que hemos ofendido a Dios y empieza esa obra renovadora en nuestras vidas. Nos devuelve la alegría y nos levantamos diferentes después de orar y pedirle perdón al Señor. Así empezamos a crecer espiritualmente y vemos reflejado ese proceso de crecimiento como una obra del Espíritu Santo que perfecciona la obra que inició nuestra salvación. Si todos los que somos parte de la Iglesia de Cristo crecemos y recibimos un nuevo tipo de vida, una nueva calidad de vida y dejamos que el Epíritu Santo trabaje en nuestras vidas desplegaremos el tipo de amor que Jesús manifestó durante su ministerio sobre la tierra y la gente nos conocerá por ese mismo amor. Juan 13:34,35. La Iglesia de Cristo tiene que ser restaurada para que durante la manifestación del poder ilimitado de Dios fluyan los dones del Espíritu Santo y alcancemos un nivel de madurez espiritual y se convertirá en un templo santo (Efesios 2:21) en donde podremos ofecer sacrificios espirituales aceptables a Dios por medio de Jesucristo. Que el Espíritu haga su obra en nosotros en estos días donde hay tanta corrupción, tantas influencias satánicas, cuando los aires estan tan contaminados y lo peor de todo la apostasía que esta entrando en las Iglesias de Dios contaminando a congregaciones enteras enseñando doctrinas de error que sutilmente se introducen en las Iglesias y solo creyente llenos del Espíritu Santo pueden darse cuenta de lo que está pasando, porque son avisados por ese mismo Espíritu para advertir a los demás del problema. Hermano permita que sea usted esa persona que de el aviso, permítale al Espíritu Santo llenarle de su poder para que su congregación no sea una de las perjudicadas con ese demonio apostata que se está introduciendo en las Iglesias de Cristo hoy día. Deje que el Espíritu Santo lo use a usted como atalaya de su palabra y muchas almas se salven de caer en las trampas del enemigo de la justicia. Como le queda poco tiempo quiere arrasar con todo, pero Cristo lo venció en la cruz del calvario y la sangre de Cristo tiene poder y somos cubiertos por esa preciosa sangre y nada nos detendrá, porque somos mas que vencedores. Aunque él esta enojado y dándole guerra a los cristianos, nosotros le daremos guerra a él. Tenemos las armas para guerrear en el nombre de Jesus. Ya al diablo le queda poco tiempo y él lo sabe. Esta dando las últimas patadas de ahogado y quiere molestarnos y atemorizarnos, pero él esta vencido ya. Si estamos cubiertos con su sangre nada nos puede tocar. Ya tenemos dueño, levantemos nuestras manos al cielo y digamos, Señor tu eres mi dueño, satanás no tiene parte ni suerte en nuestras vidas, pertenecemos al que nos salvó, nos redimió con su sangre preciosa, y nos limpió de todo pecado, y esperando ese día que venga en gloria a llevarnos a esas mansiones celestiales que está preparando para nosotros. AMÉN.
Varias notas de este mensaje
Fueron tomadas de El Espiritu Santo y la Restauración
Por James Rovison
